La mayoría de la personas utilizan habitualmente esponjas sintéticas sin conocer las propiedades y los beneficios que se obtienen con el uso frecuente de las
esponjas vegetales.
Usarlas para cuidar la piel es un placer natural . Ellas crecen en forma de enredadera y forman parte de la familia de las cucurbitáceas (igual que los pepinos y calabazas). Son propias de las zonas tropicales y se adaptan a climas templados.
Hay varias especies, las más conocidas son Luffa Cylindrica y Luffa acutangula.
Sus tallos trepadores pueden alcanzar 15 metros de longitud, poseen grandes hojas rectangulares y por ser una especie monoica tiene en forma separada flores masculinas y femeninas de vida corta. Sus frutos son alargados de un tamaño promedio de 25 cmts. pero pueden llegar al metro de longitud.
Desde la planta hasta disfrutarla en nuestra piel, la esponja vegetal atraviesa todo un procesamiento
artesanal que implica: pelar, limpiar, lavarlas y secarlas adecuadamente hasta lograr una esponja de calidad lista para ser usada.
La esponja vegetal se comercializa en bruto (cilindros) o en productos elaborados a mano para la limpieza como: guantes, cepillos, manoplas , discos faciales o para extender el
confort de un buen baño con ojotas de esponja vegetal.
Las opciones son muchas y están disponibles para incorporarlas disfrutando el cuidado diario , ¿ cuál vas a probar hoy? .